Las Verdades de la Vida: De La Religión y Otros Pecados…

Con esto del caso del Padre Alberto he pensado sobre la religión y demás tendencias segregacionales que solo buscan peleas y conflictos.

En algún momento de mi niñez, zapping la tele yo vi randomly el programa de ese señor, siempre me llamó la atención ver a un cura en televisión, yo crecí en un ambiente de religión “católica”, me bautizaron, estudié en un colegio católico a partir del 5to grado, hice la primera comunión y casi me confirmo (pero la monja se molestó con nosotros y ese fue el “castigo”) y ya, hasta ahí llegó mi religión, pues partir de entonces empecé a creer que:

· No hace falta pertenecer a una Religión para saber que matar es malo.

· No hace falta profesar una religión para respetar al prójimo.

· Y dependiendo de lo que este dentro de la cabeza de cada quien: Creo sobre todas las cosas que hay alguien/algo allá arriba que todo lo ve y que muchas veces se pregunta que demonios estamos haciendo con el pedazo de terreno que nos dio y por que los estamos destrozando en tan corto tiempo.

En todo caso, de mi niñez también recuerdo que no me gustaba confesarme para tomar la comunión pues nunca confié en los sacerdotes, pensaba “me viene a decir este pecadora a mi y sabrá Dios cuantas cosas hace el?” Viendo esto, creo que no estaba tan equivocada, no digo que todos sean así, pero ninguno se ha hecho acreedor de mi confianza. Yo no estoy ni en pro ni en contra del celibato (tengo que pensar más profundamente sobre eso para emitir una opinión) pero si ese señor asumió la religión es tal y como viene pues, el combo completo. Pero él en cambio iba, se paraba a dar una misa le decía pecadores a los demás y a la vez mantenía una relación con una mujer y cuando fue descubierto dijo “no tengo doble vida” entonces que por favor me explique qué es eso.

Una vez vi un grupo en Facebook que decía “God is love, not religión” debo decir que no he estado mas de acuerdo con algo (tomando en cuenta lo totally pointless que son los grupos que se forman ahí). La religión trae cosas como estas del Padre Alberto, y otras mucho peores.